La Revista Musical Chilena ha identificado como sus principales áreas de interés, la cultura musical de Chile, considerando tanto los aspectos musicales propiamente tales, como el marco histórico y sociocultural, desde la perspectiva de la musicología y de otras disciplinas relacionadas. Incorpora contenidos vinculados a compositores, ejecutantes e instrumentos de la música de arte, folclórica, popular urbana e indígena, al igual que artículos atinentes a manuscritos, investigadores, aspectos teóricos y modelos musicológicos, además de nuevos enfoques de la musicología como disciplina, tanto en Chile como en América Latina.
Bailes folklóricos chilenos
Entre muchos, destacan: en la zona norte, el carnavalito, el challa-challa, la cueca nortina, el torito, el trote o trotecito, el huaynito, el taquirari, el huachitorito, la diablada y los bailes de chinos; el sau sau, en Isla de Pascua; la cueca, la mazamorra, el pequen, la sajuriana y el sombrerito, en la zona central, y la trastasera, la pericona, la cueca del chapecao, el costillar y la sirilla, en la zona sur.
Los orígenes de esta danza se encuentran en el pasodoble español. Surgió a comienzos de siglo y se incorporó a la música de varios países sudamericanos, como Ecuador, Bolivia y Chile. Se expresa en un baile zapateado y galante, donde los brazos están levantados y doblados, con los I puños cerrados o sosteniendo las manos de las mujeres.
Se le considera el más tradicional de los bailes del norte del país, principalmente de las zonas pre-cordilleranas de la Primera Región, de gran influencia altiplánica. Es parecido a la cueca, ya que luce la conquista del varón a una coqueta dama, guiados por el gracioso movimiento de los pañuelos.
El 6 de noviembre de 1979 fue declarada danza nacional de Chile. Respecto de su origen existen tres corrientes: la que lo atribuyen a una expresión indígena; otra, que sería de procedencia española; y la última, que tendría ascendencia negroide-africana. Es un baile de carácter amoroso, a través del cual una pareja (dama-varón), con un pañuelo en la mano, realiza toda una escena de "cortéjeos (conquista).
Se la conoce también como sajuria, sijuría, sanjuriana, sejuriana y secudiana. Era una danza en pareja, típica de la zona central, que ya se encuentra extinguida. Existían varías coreografías. En la más conocida los bailarines se desplazaban con taconeo, evolucionando con zapateo de punta y taco, enarbolando pañuelos.
Es una danza chilota colectiva, que sucesivamente interpretan todas las personas en las fiestas tradicionales. En sus desplazamientos los bailarínes imitan el movimiento de una embarcación cuando navega, lo que refleja una característica del medio ambiente en el cual se desarrolla la vida de los habitantes de Chiloé.
Danza en pareja, una de las más características del archipiélago de Chiloé. Se observa influencia española en la postura y en algunos giros de los bailarines. Hay varias versiones, y en una de ellas el canto habla de España, de los ole y los toros bravos.