MUSICA ANDINA EN SANTIAGO DE CHILE

CONCLUSIONES



Sin lugar a dudas los nuevos tiempos materializados en la llamada globalización nos imponen nuevos y grandes desafíos, pienso que no muy distintos a los ya mal o bien enfrentados (según sus resultados e intereses involucrados) en otras épocas en que el mundo se viera sujeto a situaciones de impacto global. La música no escapa a este problema, al igual que en otros ámbitos del quehacer humano, esta también sufre la discriminación, en este caso en un doble sentido, por un lado como actividad profesional y al interior de ella misma sufre segmentaciones derivadas de los grupos de poder que escalerizan los repertorios según los conglomerados consumidores o creadores, priorizando determinados parámetros para determinar una estética según sus intereses valóricos y económicos.

La intensificación de los flujos culturales, sigue generando, en el plano económico-social discriminación y desigualdad, en lo cultural fragmentación y homogenización en oposición a la diversidad, conflictos entre lo local y lo "universal". No obstante lo apocalíptico de los diagnósticos en este sentido la globalización no solamente tiende a universalizar una cosmovisión (verdad única) sino que también genera cambios de percepción en las categorías fundamentales de la estructuración de la vida humana como por ejemplo la relación "espacio-tiempo". Todo esto conduce a estimular la necesidad de una toma de conciencia de la diferencia, toma de conciencia de una individualidad, de una dimensión espacio-temporal distinta, en definitiva de una identidad. Entendida como un resultado, no simplemente un origen ya que esta visión nos conduciría inevitablemente a un esencialismo, "según la cual habría una identidad originaria y todo lo que sigue sería una pérdida, lo que deduce a una política conservadora y al final discriminatoria" (J. Ortega: 1990).

Como se dijo anteriormente, este trabajo pretende una caracterización del repertorio andino en Santiago, pero además, también muestra como se expresa esta diferencia desde la música a partir de las tres instancias de interacción antes descritas, con la convicción de que la diversidad musical se mantendrá en la medida en que se cree una instancia ideológica práctica y propositiva capaz de articular la diferencia, de articular los v/s (homogéneo-heterogéneo, universal-local, inclusión excusión) en favor de una integración cultural real, democráticamente construida, José Martí (1853-1895) en el siglo antes pasado decía "Injértese en nuestras repúblicas el mundo; pero el tronco ha de ser el de nuestras republicas".