HISTORIA DEL ROCK CHILENO

EL GRAN AUGE



Esta nueva década estará marcada de manera profunda en lo político y social. Hechos como la guerra de Vietnam, Mayo '68 y la Revolución Cubana, que parten en los '60, tienen su repercusión global en Chile a principios de los '70. Es el paulatino advenimiento al poder de sectores sociales permanentemente desplazados, que se encuentran interpretados por el gobierno que constituye la coalición de partidos de la Unidad Popular. Junto a este hecho, se ha producido una continua valoración de la cultura latinoamericana, a la que muchos accederán refrendados por una perspectiva anti-imperialista y militante. Es esta la que explica, en parte los procesos de chilenización y posterior nacionalizaci6n del cobre, así como la incipiente solidaridad con Vietnam y Cuba, que representaban una bandera de libertad para los pueblos del Tercer Mundo. Flota en el ambiente la necesidad de rescatar la expresión folklórica y autóctona, la que tendrá su correlato más directo en la obra de la Nueva Canción.

La gran característica del rock nacional en este momento de la historia, será la apropiación de elementos de raíz folklórica o atmósferas timbrísticas de carácter latinoamericano, que enriquecerán esta expresi6n y le otorgarán una impronta diferente. Muchos de los conjuntos que participan de esta tendencia distintiva provenían de agrupaciones formadas a partir de la segunda mitad de los '60. Casos como Los Jaivas y Congreso son un ejemplo: estos últimos se constituyen a partir de los hermanos González y Fernando Hurtado (integrantes de Los Masters), junto a Francisco Sazo, que por entonces ha comenzado a poetizar en castellano.

En su primer LP, asoman tímidamente elementos latinoamericanos, aún poco definidos, pero ya interesantes, sobre todo en la intención y la búsqueda de un sonido. En líneas generales, tiene los elementos propios de la creación Beat Psicodélica (es decir, pulso constante; guitarras procesadas por fuzz en primer plano: y un bajo sencillo y poderoso que acompaña atmósferas blueseras). Este disco abre con "Maestranzas de noche", musicalización del poema homónimo del poeta Pablo Neruda, con el cual estuvieron presentes en el Festival de la Nueva Canción Chilena. Está hecho a partir de una guitarra y contiene algunos particulares elementos rítmicos. El álbum data de 1971, aunque el grupo había comenzado a trabajar en la ciudad de Quilpué. A pesar de encontrarse lejos de los centros de información, encuentra múitiples referentes del rock anglosajón de vanguardia (Simon and Garfunkel, The Who, Jimi Hendrix, Iron Butterfly). En el caso de los primeros, se debe destacar el impacto producido en el medio por su versión de "El cóndor pasa" lo que junto al bullente sentimiento latinoamericanista, provoca búsquedas con intención local; búsquedas que pueblan este trabajo a pesar de su irregular resultado. Por otra parte, muestra un lenguaje textual rico en imágenes, reafirmando una opción consciente de los grupos de esta tendencia: la reivindicación del idioma local. Refleja además, la ingenuicidad de un momento de cambio, donde cualquier utopía era posible y el hombre, un ser ilimitado.

Para escuchar:

Maestranzas de noche - Congreso
Vamos andando mi amigo - Congreso


Los JaivasEl caso de Los Jaivas es un tanto similar. Sus integrantes son de Valparaíso, pero con una diferencia: conformaban a los High-Bass, banda madre, cuyo nombre producto de una deformación fonética, se fue transformando en el ya conocido "Jaivas". No hubo, cambios en la formación, pero sí una evolución musical que, lentamente, los fue alejando del repertorio que cultivaban en un comienzo, (compuesto primordialmente de boleros, valses peruanos, cumbias y uno que otro rock'n'roll, lo que Interpretaban en festivales estudiantiles, escenario común para las bandas de esa época) pues ya en los '70 habían desarrollado una manera sui generis de ver la música. Buscaban ahora y de forma radical, una conexión con la raíz ancestral y la cultura del continente, en donde la improvisación constituía uno de los ejes creativos fundamentales. Su primer elepé fue una producción independiente, de tiraje limitado, aparecida en 1971, titulado "El Volantín" que superó cualquier frontera o norma musical presente hasta ese entonces. Experimental de principio a fin, está marcado por una serie de elementos casuales, comenzando por su producción, realizada por ellos, a costa de vender su órgano electrónico, y su equipo de amplificación.

Sin duda, el enfoque que motiva a esta agrupación, amén de otras, como Los Blops, Congregación y en menor medida Embrujo y Congreso, es la tentativa por construir una cosmovisión, que en el caso de los primeros es radical. El origen de esta experiencia proviene de la confluencia de varios fenómenos, entre los cuales la psicodelia juega un papel importante. Este elemento llegó vía hippismo a Chile, y en líneas generales, propone la exploración de potencias mentales desconocidas, a través del desarrollo de nuevos estados de conciencia. En esta perspectiva, propicia el rescate de las culturas precolombinas y orientales milenarias, a las que están asociadas interesantes rituales y el uso de drogas alucinógenas que facilitan el acceso a dimensiones distintas de la realidad. En estas experiencias se devela una profunda relación con la naturaleza, de la que el ser humano se siente parte integral y que es fundamento existencial de estas culturas, representado en la trilogía hombre-tierra-cosmos (Dios), situación no comprendida a cabalidad por la psicodelia desde su origen, en los países del primer mundo.

De esta manera, la Psicodelia no transita por caminos más profundos, aunque su influjo provoca reflexiones laterales en torno a la cultura capitalista y el pensamiento racional occidental. Esto, junto a elementos que formaban parte del ambiente -como el indigenismo, la opción por el tercer mundo, la autonomía regional, la reformulación de los patrones de comportamiento sexual, la reinterpretación del concepto de la vida en comunidad- crea en grupos como Los Jaivas una singular respuesta poética.

Juan Pablo Orrego y Eduardo GattiOtro conjunto que completa la trilogía más importante de esta hornada, lo constituyen Los Blops. Eduardo Gatti (guitarra, composición, voz) integraba a fines de los '60 The Apparitions -quienes cantaban en inglés, llegando a tener un relativo éxito con el tema "Cuando un hombre se enamora" (cover del popular "When a Man Loves a Woman", interpretado por el cantante negro Percy Sledge). Junto a Juan Pablo Orrego (bajo eléctrico, composición y voz) se integra a Los Blops a partir de 1968. Estos, compuestos además por Juan Contreras (órgano, flauta traversa), Sergio Bezard (batería), Julio Villalobos (guitarra, composición y voz) habían comenzado a trabajar a mediados de los '60, haciendo covers de temas de Los Beatles y los Stones, sin mayor difusión. Con la llegada de Gatti y Orrego, esta agrupación tomará un rumbo distinto, alcanzando ribetes similares al caso de Los Jaivas: lograrán un sello personal, basado en la aleatoria de elementos de la música vernácula, barroca, progresiva, sintetizada en la forma canción, manifestando sobremanera una carga existencial. Es así como llegan a su primer LP, el que incluye el que se convertirá en un clásico de nuestra música: "Los momentos". Esta música de síntesis -que en sus dos primeros álbumes nos recuerda conceptos composicionales Beatles (relación música docta-popular; uso de elementos de la música concreta -cintas al revés, búsqueda de sonidos experimentales- y utilización de varias voces solistas) y una estilística folk, tuvo como correlato la experiencia de la vida comunitaria. Varios de ellos vivieron en una casa ubicada en La Reina, a la que llamaban Manchufela. Este estilo de vida parecía constituir un símbolo de status más que una necesidad real -de hecho, el arriendo de la casa era pagado por el suegro de Julio Villalobos-.

Para escuchar:
Los momentos - Los Blops
Congregación - Estrecha a tu hermano


CongregaciónOtras tres agrupaciones que constituyen propuestas importantes dentro de esta tendencia fueron Congregación, Embrujo y En Busca del Tiempo Perdido, (al parecer una alusión a la novela homónima de Marcel Proust) todas ellas con uno o dos elepés editados. El caso de En Busca del Tiempo Perdido guarda ciertas diferencias, puesto que su producción discográfica se remitió a varios discos 45. El LP que grababan durante 1973 no vio la luz debido al golpe de Estado y sus masters se encuentran, hasta hoy, extraviados. El álbum "Congregación Viene" es un trabajo electroacústico; destaca desde la forma canción, toda la riqueza melódica de las composiciones. Tiene influencias tanto del folk-rock como de la canción tradicional hispanoamericana, sobresaliendo en él temas como "Estrecha a tu Hermano", reflejo del espíritu que imbuía a gran parte de la generación joven de ese entonces, testigos y actores de la agudización de los conflictos colectivos. Todos los textos pertenecen a su líder Antonio Smith, quien sugiere una cercanía con la poesía romántico-metafísica de ingleses como William WordWorth o Lord Byron. Tras el advenimiento del régimen militar, Smith abandona el país, radicándose primero en Argentina, donde edita el largaduración "Sol de Chile" (producción que solidarizó con las victimas del golpe), para luego trasladarse a Europa y Estados Unidos. Allí retomó su labor musical grabando, bajo el nombre artístico de Awankana (voz sudamericana que muestra el ascenso del principio espiritual de la vida humana), cerca de veinte discos compactos, los que recogen su proyecto de "música para una cultura universal" (o -mántica-, que evoca los tiempos por venir) una mezcla de instrumentos occidentales contemporáneos e instrumentos orientales (indios, chinos y precolombinos), que lo acercan al estilo conocido como "New Age".

Embrujo, que en sus comienzos se hacía llamar "Kissing Spell" (Embrujo que Besa), publicó dos trabajos. El primero "Los Pájaros" alternaba canciones en inglés compuestas por ellos, con musicalizaciones de poemas de Gustavo Adolfo Bécquer y Federico García Lorca. El segundo, contenía sólo temas propios cantados íntegramente en castellano. Reconocían hacer un "beat achilenado" que mezclaba el jazz, el rock de esos años, y elementos timbrísticos afrolatinos. El resultado recuerda a bandas como Iron Butterfly, The Doors, Crosby, Stills and Nash, y The Beatles. Los integrantes de la banda provenían del Instituto de Sicología Aplicada y estaban embarcados en un trabajo de ayuda a drogadictos. Curioso contradiscurso, si se toma en consideraci6n la posición de Los Jaivas y la prédica psicodélica de muchos grupos en que se inspiraban. Pero sin duda el mayor aporte se aprecia en su calidad como instrumentistas y su interesante búsqueda musical. Por ú1timo, En Busca del Tiempo Perdido, mostró en su breve discografía atractivos elementos, los que van desde un sonido folk-rock hasta una vocalista femenina, María Soledad Domínguez, que posteriormente liderara "Sol y Medianoche".

La gran acogida que este movimiento tuvo es también consecuencia de una situación continental. Esta tendencia encontró ecos similares en Argentina con el grupo "Arco Iris", Perú con "Polen", Brasil con "Os Mutante"s, y Colombia con "Génesis", quienes propugnaban la síntesis como punto de partida en la creación. El estado de cosas existente en Latinoamérica facilitó la participaci6n de amplios sectores, generando las condiciones para una creación abierta y singular. Es necesario señalar que la situación de la industria del disco brindó impensada posibilidades de grabación y distribución. Por esos años, esta creció enormemente a nivel mundial y el negocio del prensado de placas era absolutamente rentable. En Chile, la IRT (en ese entonces perteneciente a la CORFO) contaba con tres áreas de difusión para la música nacional: una, dedicada a la recopilación y documentación; la segunda, que cobijaba a los cultores de proyección folklórica; y la tercera, denominada "Machitún", que agrupaba a esta nueva propuesta, entre las que además de contar con Los Jaivas, Congregación y En Busca del Tiempo Perdido, incluía a grupos como Amerindios, La Mariposa, y solistas como Manduka (seudónimo de Manuel Tiago), artista brasileño que llega a Chile en calidad de exiliado, obteniendo incluso el primer lugar en el Festival de Agua Dulce en Perú defendiendo su tema "Patria Amada Idolatrada" cuyo texto pertenece al coterráneo Geraldo Vandré, quien también viviera su exilio en nuestro país. En 1972 publica un interesante largaduración, en el que mezcla elementos del folklore latinoamericano, la música popular brasileña y el folk-rock. Contó con la participación, entre otros, de Eduardo Alquinta y Eduardo Parra (Los Jaivas); Julio Numhauser (Amerindios); y los músicos Baltazar Villaseca y Carlos Vittini (de Congregación). Con respecto a La Mariposa, se puede decir que corrió la misma suerte que En Busca del Tiempo Perdido: editaron varios singles, y el elepé que grababan en 1973 se extravió junto con gran parte del material publicado por la serie.

AguaturbiaParalelamente, continúa desarrollándose la corriente que recoge al rock en su posibilidad de código universal, sin presuponer síntesis o adecuación, sino más bien una reproducción fidedigna en el ámbito formal, emulando a los grandes talentos anglosajones. Al alero de esta propuesta encontramos a Los Trapos, que provenían de mediados de los '60, Aguaturbia, Los Amigos de María y Escombros. Estos últimos, genuinos representantes de esta escuela, estaban formados por cuatro chilenos y un inglés Walter Ziman, quien componía y realizaba los arreglos. Como era obvio, cantaban en inglés, y al igual que otras de estas agrupaciones, intercalaban en sus presentaciones covers de temas de compositores extranjeros, como Jimi Hendrix, Jethro Tull, Joe Cocker, Ten Years After y Led Zeppelin, con temas propios, situación que hasta hoy constituye una tradición en el circuito popular.

Por otra parte, estaba Aguaturbia, integrado por la cantante brasileña Denise, quien desde los nueve años posee la nacionalidad chilena; Carlos Corales (guitarra), proveniente de "Gina y Los Tickets"; Willy Cavada (batería), que, al igual que Corales, provenía de una agrupación nuevaolera como los "Red Juniors", militando posteriormente en "Los Jockers" y finalmente Ricardo Briones (bajo eléctrico), quien, contrariamente al resto, provenía del mundo docto. Estos causaron un gran revuelo al posar desnudos para la portada de su primer disco, emulando a John Lennon y Yoko Ono, quienes hicieron lo mismo para la cubierta de su primer trabajo, Two Virgins (Dos Vírgenes). La virtud de esta banda radica en la calidad de sus instrumentistas, lo que demostraba que era posible una ejecución eficaz en este género.

Frutos del PaísUn caso especial lo constituye Frutos del País, banda formada por Mario Zárate (Guitarra y voz); Hugo Raymond (órgano, piano); Reinaldo González (bajo y primera voz) proveniente de "Los Beat 4"; Carlos Bravo (batería); y Leonardo Carvajal (bajo, quien no aparece en los créditos de su único disco). Cultivaban un estilo melódico muy cercano al de Procol Harum, tanto en el patrón formal como en el uso instrumental, hecho acentuado por la preeminencia del órgano. Sin embargo, la fusión de este patrón musical con un texto de absoluto sentido localista, dio como resultado un híbrido que tuvo una inusitada aceptación popular. Esto abrió paso a una variante que logrará a través de esta amalgama, erigirse como una opción creativa que tiene un antecedente en la Nueva Ola y un consecuente en la estilística del llamado Nuevo Pop Chileno.

Para escuchar:

Sin ti - Frutos del País