1872: El compositor Emilio A. Herrera, quien publicó entre 1864 y 1869 obras de salón, en los géneros de la polka, schotisch y vals, y que mantuvo una vinculación con la Sociedad Orfeón en la década de 1870 es mencionado como Secretario del Directorio según el periódico El Ferrocarril.
Mayo 27, 2007

"Con los yaganes se extingue mucho más que si se extinguieran los chilenos"

Etcheverría, Estefanía (2007)

Informantes. Las hermanas Calderón fueron testigos privilegiados de las últimas historias de su etnia.
Las dos últimas yaganes de sangre y lengua le contaron a la periodista Patricia Stambk los estertores de su etnia. El libro "El zarpe final" recopila estas narraciones de los personajes, anécdotas, crímenes y pasiones que marcaron la vida de los últimos yaganes.

Carrapukó le kipa era una anciana cuando enviudó por última vez y se quedó sola en Mejillones. Ahí llegó Félix, un joven de 30 años que rompió la puerta, entró, se aprovechó de ella y se quedó en su casa. Tres días después pasó la policía y ella quiso denunciarlo, pero como no sabía español, lo hizo en yagán. Entonces los carabineros le pidieron al propio violador que oficiara de "traductor", y este dijo que la mujer estaba pidiendo víveres. Esta terrible historia fue contada por la yagán Cristina Calderón a la periodista Patricia Stambuk. Pero eso no fue lo único que le narró.

Después de Rosa

Rosa Yagán se volvió la más conocida de las mujeres de su etnia gracias al libro que llevaba su nombre por título y sus recuerdos por contenido. Mientras trabajaba en la creación de ese texto, Stambuk conoció a las hermanas Cristina y Úrsula Calderón, que eran algo así como sobrinas lejanas de Rosa. Poco después de la muerte de su tía en 1983, las hermanas Calderón retomaron el contacto con la periodista. Durante años las hermanas le contaron sobre los personajes, anécdotas y crímenes que marcaron la existencia de los yaganes en su pasado reciente. Pero por mucho tiempo esas historias sólo fueron un montón de casetes, hasta que una foto les dio forma. "Durante mucho tiempo pensé cómo podía armar esta historia y diría que se me reveló el año pasado cuando miré una foto de Agostini donde aparece gran parte de los últimos yaganes y me di cuenta que yo le sabía las historias a casi todos ". Así las grabaciones se tranformaron en un libro que le da nombres e historias a los rostros de la foto. Antes de ser lanzado -el evento será el próximo 22 de junio-, la publicación recibió un premio del Consejo del Libro. Seguir leyendo...

Mayo 17, 2007

Acerca del fenómeno de las Estudiantinas

Muñoz Accardi, Angel
Constatando algunos hechos
¿Qué fenómeno, aparentemente inexplicable por la vía del sentido común, hace que las estudiantinas capturen la emocionalidad del espectador más que otras manifestaciones culturales?. Es un hecho público y notorio que las estudiantinas como manifestación cultural, sea en el escenario, en la calle o en la nocturna serenata bajo un balcón, movilizan las fibras espirituales del espectador.

En general, desde el punto de vista musical y literario, si bien las construcciones armónicas y los textos con que las estudiantinas trabajan son muchas veces sencillas, sin embargo algo "mágico" genera en el espectador que se expone a ellas cautivándoles su atención.

Intentemos una explicación.
Desde un punto de vista histórico, vivimos en un período del desarrollo de la humanidad caracterizado por el tránsito de una sociedad industrial moderna a un estado de posmodernidad. Tres atributos esenciales tipifican esta fase de cambio de un estado a otro. Seguir leyendo...
Fuente: Ronda La Tuna

Abril 30, 2007

Entrevista a Juan Hernández, director de Diapasón Porteño

García-Huidobro, Cecilia (2007)
Había una vez identidad

En lo alto de un cerro de Valparaíso conversamos con Juan Hernández, director del cuarteto de guitarras Diapasón Porteño, sobre esta manifestación basada en la suma de las cuerdas más fundamentales de la canción chilena. Las influencias, hitos y exponentes de una tradición de la música popular criolla que brilló en radios y escenarios, conformando una escena indisolublemente ligada a la extinguida bohemia nocturna y sus emblemáticos locales.

Un largo camino debió recorrer Juan Hernández para arribar a aquello que más lo conmueve: la guitarra popular chilena tocada grupalmente. Formado de manera autodidacta, partiendo por su madre, que le enseñó los primeros acordes para interpretar viejas tonadas, el Director del grupo Diapasón Porteño se transformó, sobre la base de su talento y pasión, y gracias a los maestros, cancioneros y experiencias, en un virtuoso ejecutante y profundo conocedor del instrumento central de la canción chilena. A través de los años, ha reunido una impresionante colección de vinilos que da cuenta de las glorias, mitos y verdades de la guitarra en la música popular criolla. "Lo que sé de música, lo aprendí de la revista El Musiquero, que fue de enorme ayuda para quienes no teníamos la posibilidad de formarnos profesional y académicamente". Seguir leyendo...

Marzo 25, 2007

Músicos campesinos de Chiloé

Cárdenas Alvarez, Renato (2007)
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CHILOE es un cosmo de mundos que se han integrado y desintegrado a través del tiempo. La conquista del látigo y de la cruz impuso en este continente la visión de occidente cristiano, pero factores propios del aislamiento geográfico y de la resistencia de las culturas nativas, arrojan hasta nuestros días supervivencias de una experiencia milenaria.

En muchos aspectos se advierte esta indianización de las culturas europeas y la españolización de las expresiones nativas en un empalme sincrético.

No es tan evidente, en nuestro medio, este encuentro en la música, el canto y la danza. Aquí más bien la voz es española. La supervivencia mapuche es mínima, expresada en algunas escalas tonales que, subversivamente se introducen en el molde europeo con que se ha estructurado nuestra música popular y folklórica. Seguir leyendo...
Fuente: www.sitmuch.cl

Febrero 14, 2007

Fusiones y sonidos

Menanteau, Alvaro
En el contexto del enfrentamiento entre lo propio y lo ajeno, lo más creativo en los últimos 30 años ha sido la fusión de cierta música tradicional chilena (tonada, huayno, mapuche) con el rock, el jazz y otras músicas latinoamericanas.

El enfrentamiento entre lo propio y lo ajeno es una constante de la cultura latinoamericana. Desde fines de los años '20 hubo en Chile música popular difundida masivamente por radioemisoras y sellos grabadores, la cual tempranamente se dividió en repertorio local y extranjero.

El repertorio local, denominado "música típica", consistió en una estilización de nuestro folclor y se definió a partir del formato establecido por Los Cuatro Huasos en 1927, y Los Huasos Quincheros (1937). La música típica se basó principalmente en la tonada y la cueca de la zona central de nuestro país, es decir, de la zona patronal y latifundista de Chile. Para sus adeptos, la chilenidad radicaba en esas manifestaciones folclóricas, en desmedro de la música altiplánica y mapuche. A principio de los '60 esta modalidad evolucionó hacia el neofolclor, con un repertorio similar al anterior, pero con arreglos más elaborados. Seguir leyendo...
Fuente: Diario La Tercera